La técnica de la mastopexia o elevación mamaria se emplea para volver a colocar de nuevo el tejido mamario en una posición más alta. En la Clínica del Doctor Gómez Bravo, no solamente le damos importancia en esta intervención a subir el pecho en sí, sino que también queremos que la paciente vuelva a sentirse a gusto con la forma de su pecho.
Para ello, nos fijamos detenidamente en que luzca globalmente una apariencia más bella. Pero, ¿cómo lo hacemos? Los profesionales de nuestra clínica trabajamos cada día en el embellecimiento mamario. Este procedimiento médico se basa en el rejuvenecimiento y la recuperación de su forma, sin que sea necesario la utilización de implantes. Sin embargo, hay ciertos casos, en que es necesario un pequeño implante para que la mama tenga más relleno y volumen.
La finalidad de la elevación mamaria, como su propio nombre indica, consiste en elevar y renovar la forma de las mamas caídas. ¿Cuántas mujeres no están conformes con la forma de sus pechos? Al fin y al cabo, es una parte muy importante de la anatomía femenina. Les permite lucir escotes en verano y en ocasiones especiales como: bodas, bautizos y comuniones, donde lucen vestidos para la ocasión. Todas quieren tener un aspecto hermoso, pero con el paso de los años, la gravedad les juega una mala pasada y empiezan a caerse poco a poco. Otro factor que afecta a las mamas negativamente es la pérdida de elasticidad. Esto provoca también el descenso de las mamas. Es importante mencionar que con los embarazos y la lactancia posterior, las mamas también caen, al dar de mamar a los pequeños.
¿Qué mujeres deben someterse a una intervención de elevación mamaria?
En la Clínica del Doctor Gómez Bravo recomendamos que las mujeres de edades comprendidas entre los 30 o 35 años, puedan exponerse a la operación de elevación mamaria, siempre y cuando quieran hacerlo, para mejorar su aspecto estético. Con el paso del tiempo, los pechos van cambiando y observamos en ellos las siguientes situaciones que pueden darse: estrías, caídas, vaciado, ptósico e involucionado. Todos estos factores se deben a cambios que ha sufrido la anatomía femenina entre los que se incluyen las dietas de adelgazamiento y los embarazos, entre otros.
¿Por qué nos están contentas las mujeres con la forma de sus senos y precisan de una elevación mamaria? No solamente es que el pecho esté caído, pueden darse muchos otros casos que pasamos a explicar a continuación. Cuando hay una desproporción entre los senos que queda como algo antiestético o bien una mama tuberosa. Con este último término, nos estamos refiriendo, a cuando es muy estrecha en la zona de la base y las areolas cuentan con una dilatación en exceso. Estas causas de las que estamos hablando pueden darse desde edades tempranas cuando las jóvenes pasan por la adolescencia y sufren diferentes cambios hormonales y físicos.
Recolocación del tejido en la elevación mamaria
La preparación de los profesionales de la Cínica Gómez Bravo para la técnica de elevación mamaria comienza con anestesia local y sedación profunda o bien, con anestesia general. Lo que hacemos es volver a colocar el tejido mamario. Para ello, hacemos en primer lugar, una incisión en la areola para quitar la piel que está por encima de la misma hasta la zona más alta donde será movida. En nuestra clínica, tenemos muy en cuenta en el caso de que haya que quitar mucha piel, lo que hacemos es prolongar la incisión hasta el surco para que con o sin una mini-cicatriz, quedará plasmada en el círculo sub-mamario. Luego, moldeamos el tejido mamario y hacemos los retoques correspondientes adecuados a la forma de la aerola y el pezón. Por último, suturamos la zona de la intervención con las mínimas cicatrices.
